5.2 – La reconstrucción de la identidad

Vemos ahora dos novelas de los años ochenta – inicio de los noventa: El desorden de tu nombre (1986) y La soledad era esto (1990). Consideraremos estas obras juntas por sus años de publicación muy cercanos y sus similitudes estructurales y temáticas – de hecho, han sido republicadas en una recopilación llamada Trilogía de la soledad, que incluye también Volver a casa.
Escribe Marcos Maurel en Notas a la Trilogía de la soledad de Juan José Millás:

Los tres protagonistas de estas novelas son cuarentones que comparten vivencias político-sociales. Forman parte de aquellos jóvenes idealistas del 68 que creyeron que el cambio social era posible. En el presente narrativo (mediados de los años 80) todos ellos han perdido su ideología y se han convertido en seres pragmáticos1

Fabián Gutiérrez, en Como leer a Juan José Millás, añade que la generación a la que pertenecen los personajes Julio, Carlos y Ricardo – los hombres que triunfan profesionalmente en las dos novelas – es la generación a la que pertenecen Adolfo Suárez, Felipe González, el Rey Juan Carlos – que accedió a la Jefatura del Estado antes de cumplir sus cuarenta años – y lo mismo Millás. En esta generación se ven reflejadas las personalidades que van a entrar de lleno en la vida política de la nación, ocupando los puestos más altos2.
Como afirma Carlos Rodó, un personaje de El desorden de tu nombre, si consigues alcanzar un puesto de poder en torno a los cuarenta años, te mantienes ya en esa órbita toda la vida. De otra manera, lo que no se haga en esta década no se hará nunca.
Para los hombres parece ser un período de adecuación a la sociedad, de reconstrucción de una identidad necesariamente falseada en un mundo falso. Por lo que concierne a las mujeres, éstas son víctimas de la carrera de sus maridos, pero acaban por rebelarse poniendo en cuestión la realidad a través de la escritura: «la escritura sirve para reordenarse, para atajar la locura que en todos habita. La escritura nos duplica y es un simulacro de un simulacro (el mundo) que al menos se deja medio dominar»3.



1 Marcos Maurel, “Notas a la Trilogía de la soledad de Juan José Millás”, http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=2153324, p. 79
2 Fabián Gutiérrez, Como leer a Juan José Millás, cit., p. 100


3 Marcos Maurel, “Notas a la Trilogía de la soledad de Juan José Millás”, cit, p. 84